ESPEJITO, ESPEJITO !!!
Por: J. M. Rentería
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Hay días que definitivamente no son nuestros mejores días, pareciera que las cosas no están de nuestro lado, que las situaciones difíciles nos pasan solo a nosotros y que ni siquiera el chapulín colorado puede ayudarnos.
Hoy es uno de estos días para mí, amanecí medio apachurradona y de pilón, llego a mi trabajo donde las cosas nunca están bien o mejor dicho, siempre están ligadas al humor de mi jefe, y que me doy cuenta que se me olvido hacer algo, algo que no tenía importancia, ni repercutía en nada, pero era un pretexto perfecto para que mi jefe comenzara a desahogar su mal humor, y me dijera cosas hirientes y ofensivas, él es así;otro día,con ese mismo problema se hubiera reído, pero hoy estaba de genio, así que se portó grosero. Ya después de discutir con él, salí de su oficina y me metí al baño a llorar mi tristeza, a sentirme mal porque no valoraba mi trabajo, porque jamás tenía una palabra de reconocimiento para mí, al contrario por el mínimo detalle me ofendía en lo personal y en lo laboral, entonces, ahí sentada llorando otra vez por lo mismo, entendí que no debía esperar que el cambiara, la que debía cambiar era yo.
Muchas ocasiones somos así, queremos imaginar que las cosas van a cambiar solo por desearlas, queremos que las personas cambien, y que mágicamente comiencen a portarse bien con nosotros, que nos valoren, pero lo cierto es que no podemos estar esperando, el tiempo pasa y la vida también, debemos pensar en nosotros, querernos y cuidarnos, porque nadie más lo hará.
Entonces ya después de estar en el baño me lave la cara, me maquille de nuevo, y aun con los ojos hinchados me vi en el espejo y me dije, EDDA, eres única, eres una gran mujer y no necesitas que nadie te lo diga, ya lo sabes, y entendí que aunque yo quiera, no puedo cambiar a las personas y decidí que a partir de ese día, dejaría de formar parte de la montaña rusa emocional del humor de mi jefe en la oficina, y de cualquier persona que quisiera afectar mi paz, me bajo del carrito, me dije,suspire profundo y continúe con mi día normal.
Curiosamente al cambiar mi actitud cambio también la de él, yo veo las cosas de diferente manera, hago las cosas lo mejor que puedo y más, sin esperar nada a cambio, mi perspectiva es diferente, me valore y deje de esperar.
Mi vida no es fácil, pero lo cierto que la de nadie lo es, unos batallan por unas cosas y otros por otras, las cosas no cambiaran con solo desearlo, debemos hacer algo y si no puedes con el enemigo, pues como soldado cobarde, emprende la retirada y el reconocimiento que necesitaba que me diera alguien más, me lo doy a mí misma frente al espejo.
-Espejito, espejito, quien es la más bella, inteligente, trabajadora, responsable mujer?
-Tu EDDA, TU!
Por: EDDA
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Por: Dr. Fernando A Herrera Martínez |
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