SOTA, CABALLO Y REY. Por: FERNANDO ANTONIO HERRERA MARTÍNEZ.
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“VILLANOS”.
Siempre se ha sabido que el pueblo cambia con rapidez de villanos. En los primeros meses de gobierno, la imagen de Don Javier se vino abajo por la falta de obra, como que andaban como gallinas recién compradas, luego los actos de corrupción que se volvieron del dominio público, tanto con personajes como el entonces síndico y su coordinador de gabinete Madero, luego se ventiló lo del DIF con las despensas, tres licitaciones, dos en pensiones civiles del estado y otra en Salud. Los errores de Tere Ortuño en Bachilleres, de Cuarón en Educación, en fin, pintaba de negro el panorama rumbo al primer informe de gobierno. Inteligente y astuto, Don Javier recordó la clave de su victoria, que fue el ofrecimiento de llevar a la justicia a Duarte y empezó a trabajar con ese tema para buscar un repunte en su nivel de aceptación, pero el gobierno federal resintió los intentos de pasarle la pelota a su cancha y trató de desquitarse negando recursos comprometidos con Chihuahua. Don Javier se vio en su mero mole, cuando se le pusieron de pechito José Antonio González Anaya y Alfonso Navarrete Prida, noveles secretarios de hacienda y Gobernacion, respectivamente. La figura de Don Javier se fue a las nubes y su índice de apreciación se recuperó de manera increíble. La caravana por la dignidad me salió de diez. Pareciera que de ahí en adelante se capitalizaría todo lo que se había logrado, sólo había que estar atentos y no bajar la guardia. El rival que se había conseguido Don Javier no se iba a quedar callado y derrotado. Eso no está en el ADN de Peña Nieto, por lo que se empezó a notar algo cuando vinieron decisiones para cambiar del ámbito local al federal algunos de los triunfos más importantes en materia de combatir la impunidad por parte de Don Javier, también le tumbaron el tema del Tribunal Superior de Justicia, aunque le perdonaron la judicatura y a Lucha Castro. Sin embargo, quien piense que ese pleito ha terminado, está muy equivocado, pues ni Don Javier, ni el Presidente Peña son de dejar asuntos pendientes. Por una parte, hay certeza de que Don Javier sabe - debe saber- que al presidente no se le gana, si acaso se le sobrevive, y esa es su tarea, después podría retomar el pleito en otras circunstancias, dependiendo de cómo terminen las elecciones, lo cual nos indica que el resultado podría favorecer a Don Javier o bien empeorarle su situación. Algo es seguro, el pleito trascenderá el sexenio, a Don Javier, si ganara Anaya lo impulsaría el olfato político para ir por todas las canicas, incluida la posibilidad de ser el siguiente, pasando por la posibilidad de encarcelar algunos personajes de muy alto nivel. Pero si gana AMLO no lo dejaría seguir con su revancha porque se impondrá el amor y paz por los primeros meses de idilio entre el pueblo y el nuevo presidente. Ahora que si gana Meade, Don Javier enfocaría sus baterías a ir por el partido, desplazando a Anaya, ya que en el gobierno no tendría ningún futuro, dándose la posibilidad de hasta una licencia para dejar un interino.
Las especulaciones nos resultan útiles para asomarnos al futuro, tratando de visualizar diferentes escenarios. Usted también estará en esas. Y seguro tendrá alguna opinión.
Ahora agreguemos la tontería de Cuarón de no saber tratar y ponerse de acuerdo con los maestros que ya en la calle y con la razón que les asiste pueden agregarle un chispazo a la gasolina derramada que para nada le sentaría bien a Don Javier, imagine que la Octava se une con la 42 y le paralizan la educación de todo el estado. Le echaría la culpa al presidente? Entendería la solidaridad de los maestros? Y si se unen los padres de familia? A quien le echarían la culpa? Estamos ente un escenario en el que ya metieron a Don Javier en un callejón del que solo se puede salir doblando las manos. Y no es de los que doblan rodilla.
Hay algo que debemos tomar en cuenta, los maestros aguantan vara, lo han hecho por mucho tiempo y con innumerables gobiernos, pero cuando se deciden a salir a la calle no se rajan ante nada ni ante nadie. Eso de que la negociación iniciará cuando dejen el paro era cuando ellos los buscaron, los hicieron marchas, caravanas y plantones, no ahora que han enarbolado su bandera y tomando oficinas de gobierno, con todo y la suspensión del clases.
Hay que decir que hay otros asuntos pendientes de resolverse, entre ellos varios convenios con las Juntas Municipales de Agua y Saneamiento en donde hay una pólvora que sólo está esperando una chispita para levantar el fuego y que truene la bomba.
Desde luego no es todo, porque en cada una de las dependencias hay un sinnúmero de voces acalladas pero inconformes con el trato que han recibido desde el nuevo gobierno y también esos temas son gasolina lista para aventarse sobre el fuego.
El villano que se fue pasará a la historia como tal, pero los nuevos villanos ya empezaron a recibir las primeras señales de que el pueblo no perdona. ¡Aguas, están poniendo en riesgo la elección! Olviden mayorías y triunfos si dejan que este movimiento se les mantenga en el lomo por más tiempo del conveniente. Mejor negociar a tiempo que perder en el largo plazo. La visión de Don Javier da para eso.
Fuente: manuelgandaras@hotmail.com
HEC
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Por: Dr. Fernando A Herrera Martínez |
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