Jueves, 28 De Marzo Del 2024
Version Completa

EL CAMPO MAGNÉTICO DEL DESEO: ¿ESTUDIAS O TRABAJAS?

05 Febrero.2023.- "Cada persona que pasa por nuestra vida es única. Siempre deja un poco de sí y se lleva un poco de nosotros. Habrá los que se llevarán mucho, pero no habrá de los que no nos dejarán nada. Esta es la prueba evidente de que dos almas no se encuentran por casualidad"

Jorge Luís Borges

En el amor, todo es misterio, pero quien lo busca, busca la maravilla, la alegría, el colorido del mundo.

Las miradas se entrecruzan. Un segundo nada más, o dos, y sucede una descarga eléctrica. Luego, los dos se hacen los desentendidos, conversan con amigos, beben de sus copas, continúan con sus trabajos, pero una fuerza interior los obliga a buscar esos ojos en cuyo fondo ya desearían mirarse. Los buscan y encuentran una sonrisa. Una sonrisa levísima, como de la Mona Lisa, pero estremecedora, imantada. Vuelven otra vez a sus cosas pero la concentración se ha evaporado. Hay en la atmósfera músicas cómplices, flores puestas ahí, adrede, penumbras donde prosperan los encantamientos. Levanta la cabeza otra vez atraído irremediablemente por esa persona y ésta sonríe abiertamente con los demás, parece feliz, y como si de un accidente azaroso se tratara vuelve a mirarlo y pero ahora parpadea lentamente y esa millonésima de segundo antes de dejar caer sus pestañas le envía una luz sutil pero intensa. Él hace esfuerzos sobrehumanos para no caer fulminado. Luego ella vuelve a reír mientras se acomoda el pelo tras la oreja y se humedece los labios.

Hay unos cuantos metros entre uno y otra y parece un abismo. No importa: de pronto les han salido alas.

Avanzan hacia esa persona por los senderos de un mapa inconsciente. ¿Obedecen una química que sólo ellos reconocen en las feromonas del ambiente; a una trama inconsciente prescrita en los patrones de la conducta infantil; o simplemente sucumben a la pasión efímera del encantamiento? Cualquiera que sea la explicación estamos ante la más irresistible de todas las fuerzas naturales: el amor.

Los desconocidos, sin haberlo planeado, se encuentran en el mismo campo magnético. Se saludan. Las manos se tocan por primera vez; por primera vez se sonríen, se miran, se hablan. Las pupilas se abren como el obturador de una cámara fotográfica ávida de captar lo más posible. Dos enigmas comienzan a enredar sus misterios y como cables eléctricos chisporrotean. Están en el camino hacia el corazón del otro, y el camino emocional es el más fascinante de todos.

Hablan de todo y de nada, si estudian o trabajan, se presentan lo más positivamente posible, revelan sus yos auténticos, sus heridas, sus sueños. Comienzan a moverse al mismo ritmo, a engranar en una maquinaria afectiva que suponían oxidada y que ahora funciona enaceitada y mágica. Se abrazan y se sienten, por primera vez, uno en brazos del otro. El abrazo de los cuerpos no es otra cosa que las señas que un alma le hace a otra. Pero ninguno de los dos declara que desea probar sus labios, sentir las caricias, el calor de la pasión del otro.

Si logran sobreponerse al impacto de los primeros encuentros tendrán oportunidad de ponerse a prueba y responder algunas preguntas esenciales: ¿Estudias o trabajas?, ¿A qué horas sales por el pan?, es decir, quieren indagar ¿quién eres tú? y ¿qué quieres exactamente de mí?

Es quizá la única oportunidad de mirar al otro (a) con objetividad, fuera del mundo interior. Y si de verdades se trata, es mucho mejor declarar la verdad desnuda.

2.-

¿Quién eres tú? y ¿qué quieres exactamente de mí?

¿Qué cualidad enamora más a las personas? ¿La belleza física, el sexo, la vanidad, la insistencia, la adulación, el dinero, el poder, el currículum, la imagen pública? ¿Cuál de todas éstas, u otras, es la que hace que ames a una persona?

Dos poderes se enfrentan, dos carencias afectivas buscan satisfacerse. Intuyen que el amor es, sobre todo, un instinto. Por eso, en el gallinero, en el establo, en la selva y en nuestra sociedad, el macho desea a muchas hembras, y las hembras desean al mejor macho. Pero si su majestad el amor está presente la persona que es anónima tendrá un nombre pronunciado en su oído; quien era cualquiera, X, será única; quien era perecedero, será inmortal.





Autor: Alfredo Espinosa
Fuente: WWW.eldiariochihuahua.mx
manuelgandaras@gmail.com



MM
Contáctenos

gandaraventas@gmail.com
639.147.17.84

Todos los Derechos Reservados Codigodelicias.com Periodismo Libre 2024