Por: Chayo Otero
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--¿Porqe trae esa sonrisilla socarrona en la cara compa?
--es que vengo de la junta de agua
--¿eso que tiene que ver?
--dejeme le cuento chingao
--okey, okey
--como uste sabe compita, hace tiempo compré un terrenito y vine hoy a pagar el agua de mi casa y de ese lotecito.
--¿y luego?
--pos sucde que el mentado lotecito tenía un adeudo bárbaro, y por más que les expliqué que era un un terreno baldío que no tenía los sevicios que me estaban cobrando me dijeron: la red ya pasa por ahí y tiene que pagar.
--¿y luego?
--pos tuve que pagar
--¿y por eso se viene riendo?
--no compadrito, es que al salir me acordé de la charra esa de la pareja que fue a un hotel de lujo a su luna de miel.
--¿cual compa?, no me la se.
--pos resulta que fue la parejita al hotel de lujo a pasar su luna de miel, y al salir luego de tres días en la administración les presentan un cuentonón..
--¿porqué tanto dinero? pregunta el recien desposado, desglosemelo, pide al administrador
--Es tanto de la habitación, tanto por el servicio de bar que hay en su cuarto, tanto por el uso de la alberca, tanto por la discoteca que es encuentra en el penthouse, y tanto por el estacionamiento..
--péreme, péreme, lo interrumpe el hombre, nosotros no consumimos del bar, no fuimos a la discoteca, no nadamos en la alberca y además llegamos en taxi...
--pues esos servicios aqui estan y si no los usaron fue porqué no quisieron -dice el tipo con actitud de quien no admite réplicas..
--bien admite el cliente, sólo le voy a hacer un pequeño ajuste; mi mujer -aqui presente--trabaja en una oficina y para completar el gasto es también prostituta, ¿verdad amorcito? dice en tono meloso mientras voltea a ver a su mujercita, una sensualísima y opulenta morena de pronunciado escote.
--si amor, admite la mujer entornando los ojazos con fingida afectación.
--¿y eso que tiene que ver con la cuenta? pregunta el administrador.
--pues sucede que ella cobra mil pesos por sus servicios, por lo que a la cuenta le voy a rebajar tres mil pesos.
--! oigame ! a su mujer yo ni siquiera la toqué !
--Mire, yo salí a caminar en tres ocasiones, mismas que mi mujer se quedó en la habitación, acostadita, recién bañadita, con una ropita interior que para que le cuento, y si usted no subió con ella fué porque no quizo, ella ahí estaba...
--a que mi compa, o sea que ahí pasó lo mismo que con la junta de agua...
--pos si compa por eso vengo riendome.
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Por: Dr. Fernando A Herrera Martínez |
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