SOTA, CABALLO Y REY
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Jugando vencidas
Por Dr. Fernando Herrera
Los panistas se están jugando el poder, en lugar de repartirlo. Los panistas están peleando en lugar de disfrutar de la gran oportunidad que les devolvió la vida. Pancho Barrio no pudo ganar nada después de ser elegido como gobernador, incluso tuvo que gobernar con el congreso priista en su segundo trienio. ¿Será maldición gitana? Están haciendo lo necesario para repetir la historia. ¿Que si un Jáuregui es mejor que el otro? Ni dudarlo, uno es un animal político el otro es, apenas, un excelente abogado, tan bueno uno como el otro, pero en su especialidad. Se comenta que la falta de operadores políticos tiene a Don Javier en los problemas que todos estamos siguiendo, desde diversos ángulos y con diferentes intereses. Por una parte, le señalan que no le ha hecho justicia a su propio partido con los principales nombramientos de su gabinete, aunque, por el otro, les exige y manda dentro del partido como si fuese el más fiel y cumplido de los panistas. Luego, en demérito, se trajo a sus compas de la cultura a que le ayuden en la gran tarea de gobernar, aunque nada sepan de chihuahua y sus problemas. Incluso, se ha comentado que hay un plan de becas para algunos de los integrantes de esa cofradía intelectual, no se sabe si lo son, pero, seguro, ellos lo creen. ¡Faltaba más! Dicen en la plaza de los boleros, los chihuahuenses somos solidarios y nos pondremos a tono con el progreso y desarrollo de los intelectuales que nos han hecho el gran favor de recibir en su seno a nuestro gobernador. Siempre supimos que esa membresía costaría cara, tan cara, que se estuvo al borde de ir, de llevarlo, a la izquierda, pero, la vida, la vida … y sus caprichos lo colocó en una nueva oportunidad, que lo salvó de irse a la militancia del peje lagarto, aunque no se atreven, comentan, a cantar victoria cien por ciento ya que se corre peligro de que desde esta nueva posición aliente y ayude a llegar a quien sabemos admira, en lugar de cooperar para la causa con Margarita, Anaya o quien quiera que resulte.
Motivos para que estar molestos con él, sobran, dicen algunos de los dirigentes de los grupos que integran el PAN. Él lo sabe pero si le importa o no también sólo él lo sabe, aunque de que la sufre ni dudarlo. Los berrinches por desobedecerlo deben ser dignos de antologías propias de sus nuevos amigos, pero no conseguirá ser obedecido con pataletas sino que, señalan, tendrá que conquistarlos y mostrarles que, efectivamente, asume su mandato como un panista de buena sepa, como uno más de ellos y no como alguien que sólo los utilizó. Algunos hacen recuentos: Primero se empeñó en Alma como candidata por un distrito, luego no pudo ponerla como coordinadora, y terminó negociando. Luego se empeñó en meter a Fer Álvarez en el partido, pero no lo han dejado trabajar porque no ha podido soltar el extinguidor apagando lumbre por donde quiera. Enseguida, se molestan al platicarlo, le dio los mejores puestos a sus amigos de élite y de izquierda dejando a sus amigos panistas con un palmo de narices. ¿Reniega? No se vale, dicen, si se es consciente de que no se ha sabido responder a los amigos de toda la vida.
¿Qué nada les debe? ¿Entonces cómo eligió a los que lo acompañan en el gobierno? Nunca se supo de concursos de oposición, ni de competencias para ocupar lugares. Asumen que fiel a su mandato popular eligió como mejor pudo o quiso, y, reconocen: ni quien lo discuta, pero ahora que reclama control en donde no debe ni puede debería ser el momento de reflexionar y empezar a saldar las cuentas. Para empezar sentarse y platicar con sus otrora amigos para encontrar el justo medio de Aristóteles y comenzar a gobernar este gran estado.
Todos dicen estar conscientes de que Jugando vencidas no gana nadie, ni él, ni los que opinan lo que aquí se escribe, ni los chihuahuenses, así que lo más recomendable es dar un paso de costado y retomar el diálogo que nunca debieron perder.
¿Tendrán humor? Tiempo sí hay.
fernandoherrera1956@hotmail.com
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Por: Dr. Fernando A Herrera Martínez |
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