LA AMENAZA RETRO LLEGA A LA REGION.
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MIGUEL ANGEL CERVANTES G.
Después de la estampida ocurrida hace días en las filas del partidazo, lleva a pensar que algo no funciona bien al interior de los que se ostentan herederos de la revolución.
Algo que ya se sabía desde hace tiempo, un resquebrajamiento de la organización, se dan cuenta que los motivos que los unen, no son pilares fuertes que resistan el poder de libertad ciudadana, Heridas que difícilmente lograran cicatrizar , luego del tsunami electoral, no muestran señales de vida, por el contrario se ve como surgieron fantasmas de desolación y frustración, que engendraron tanta ambición que ciega a los dirigentes y los jefes en medio de la discordia abandonan la nave, buscando nuevos horizontes en otras agrupaciones dando ejemplo de falta de lealtad y compromiso.
El efecto domino se originó después de la salida de Luis Villalobos, seguido de otros personajes que vieron la oportunidad de satisfacer sus ansias de poder, las razones que dieron son diversas; desde que servirán al pueblo desde otra trinchera hasta, que es una oportunidad de conseguir lo que el partido les negó, Raúl Botello, critica a su partido de no tomar en cuenta sus cualidades de líder y opta por dejarlo.
Por la amargura destilada se puede adivinar que todos cayeron bajo el embrujo del canto de las sirenas, dirigida por López Obrador, que conoce sus ambiciones de poder y los atrae con falsas esperanzas de ocupar posiciones en la administración pública. Pero para “comer caldo de pollo primero hay que atraparlo”, no hacer castillos en el aire sin sustento. Algo insólito en esa organización que en tiempos recientes, solo se recuerda una desbandada similar igual a la de 1988. Parece que a los caciques se les salió de control o no lograron ponerse de acuerdo con las cuotas de poder que cada grupo solicita, y prefirieren romper con el estilo tradicional de sus antepasados de arreglarse sin discutir, para seguir viviendo del presupuesto. Los miembros sienten traicionada la confianza depositada y ante la impotencia solo ven como sus líderes mandan mensajes de despedida desde otra asociación.
Lo cierto es que el malestar crece, la metamorfosis por la que están transitando las distintas organizaciones políticas tiene origen ideológico al permitir que el gobierno administre los recursos del pueblo, incluyendo las voluntades, hasta convertirse en un régimen totalitario, una ruta que a nadie conviene, hasta ahora la población está condicionada a creer que solo se puede vivir dentro de las estructuras sociales creadas por el régimen.
La familia feliz sigue el mismo patrón de comportamiento repiten el mismo tipo de arreglo que los ha mantenido en el poder, heredado por sus antepasados, incapaces de crear empresas, mal-acostumbrados por la fuerte dependencia creada por el sistema político.
No rompen ese eslabón de conducta, creen que fuera de la política no se puede vivir por lo que buscan permanecer así. Al final como no hay suficientes empresas generadas por los ciudadanos, se dan cuenta que la única opción a la que se puede aspirar es ser burócrata para vivir de la ubre presupuestal, hasta agotar los recursos para luego una vez agotados, aumentar impuestos con cargo a los ciudadanos prolongando el interminable círculo vicioso, lo que crea desequilibrios macroeconómicos, y lleva a recurrentes crisis económicas.
Muchos políticos disfrazados de empresarios que amasaron sus fortunas bajo la protección del gobierno ven que el pueblo cada vez apoya menos este tipo trapacerías, sienten la amenaza de perder esa tranquilidad y se están volcando a apoyar a AMLO no por convicción sino para mantener el estilo de vida de comodidades que tanto han disfrutado y que les promete.
Agrupa a empresarios y políticos de todas las organizaciones, sin importar la ideología, ni color, unidos bajo el principio maquiavélico “el fin justifica los medios” miembros del capitalismo de compadres, como Sergio Ornelas que recientemente se reunió con AMLO. Y seguramente no fue gratis, busca obtener una rebanada.
La recién creada organización MORENA incrustada en la estructuras gubernamentales de todos los estados y en alianza secreta con el PRI han tenido un avance sorprendente, sigilosamente operan una fuerte resistencia al progreso del pueblo. Alardean de atacar la corrupción, pero promueven acciones que solapan la corrupción. Apoyó incondicional al poder sindical sin límites, lo que se traduce en compadrazgo. A nivel regional los líderes de MORENA, se jactan de transitar por el camino del éxito, Cesar Camacho y Ernesto Casillas ya se ven dirigiendo una secretaria de estado, como premio por defender el proteccionismo, que promueve, el presidente Trump. Reflejando total ignorancia económica, producto del fanatismo, se mantienen haciendo olas, afirmaciones sin argumentos sólidos. Su mantra favorito es atacar el neoliberalismo, ignoran que el país está aún lejos de entrar a este modelo, México nunca ha vivido una economía liberal, declaraciones apasionadas, producto de la borrachera ideológica.
Una promesa de J. Valenciano fue que ayudaría a personas propietarias de autos de procedencia extranjera a regularizar el “status”, este compromiso no fue del agrado de morena, despertó la envidia del “paladín de la justicia”, Cesar Camacho sintió que se estaba invadiendo su espacio y reaccionó con violencia verbal, confunde la política con la confrontación.
Los miembros de MORENA, son conocidos por tener principios filosóficos banales, creen ciegamente en las ocurrencias de Andrés Manuel. Después de la muerte de Fidel Castro quedaron a la deriva sin líder moral que los guiara a buen puerto.
Con el pueblo actúan con deshonestidad diciendo “ayúdenos a llegar al poder, para bajar recursos a los pobres” no aclaran que nada es gratuito, promueven fantasías, a lo que llaman gratuito tiene su origen en los impuestos que pagan los ciudadanos.
Toman como verdadera la fantasía inventada por AMLO que el país va a mejorar si llega MORENA, refugio del capitalismo de compadres. Es como creer que el país estaba mejor con Echeverría.
Raúl Botello en su justificación de afiliarse a MORENA dice, todos los partidos son buenos. Es verdad que hay gente buena y mala en todos los partidos, pero de ahí a decir que todas las ideologías son buenas muestra niveles de relativismo moral. Si Botello abandona al PAN por el “número de sinvergüenzas como Julio Cesar Ibarra Pacheco” creyendo encontrar renovación en un partido que es copia del PRI, es un retroceso, decisión tomada en momentos de ofuscación.
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Por: Dr. Fernando A Herrera Martínez |
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